Un final obligado

En un lugar olvidado, y dejado por las manos de quienes lo debían velar,  apareció una pequeña barca donde una mujer llevaba un puñal dispuesta a entregarse a la última morada. Antes de eso, había escritop una nota, para que todos sepan el por qué de su muerte. Su nombre era Ilene de Cornwall.

Un día encontró a un caballero que lo mantuvo por la fuerza y de alguna forma secuestrado, en su fortaleza, su nombre era Sir Lancelot, quien por una pócima perdió todo tipo de cordura. Este, cuando volvió en sí, se fue de la fortaleza, sin saber lo que había sucedido.
Tuvo un hijo Sir Galahad, quien no fue reconocido por Sir Lancelot, y quien estaba destinado a encontrar el Santo Grial.
Ante toda esta tragedia,  ella decidió suicidarse.